La Luna representa en la carta natal nuestro yo emocional. Las emociones son una parte indispensable de nuestra naturaleza humana con la que a veces nos peleamos ¿verdad? (¿a quién no le molesta sonrojarse en un momento inoportuno?).
Pero las emociones son sabias y cuidan y regulan de forma natural nuestro organismo (por ejemplo, la ira que sirve para mostrarnos nuestros propios límites, o el amor, que endulza la vida). Las emociones nos curan. Las emociones nos permiten vivir.
“Todas nuestras emociones se inscriben al nivel del cuerpo. Cuando el corazón no llora, lloran los órganos” (Boris Cyrulnik, psicoterapeuta)
Por supuesto, todas experimentamos las mismas emociones universales (miedo, vergüenza, ira, alegría, satisfacción, ternura, amor, culpa, etc.) y ser conscientes de ellas es una muestra de inteligencia y autoestima.
En nuestra carta, además, se pueden ver ciertas tendencias en nuestra forma de acercarnos y vivir el mundo emocional:
- Las Lunas de fuego (Aries, Leo, Sagitario) reaccionan pronto y rápido a los acontecimientos. Luego se les pasa. Pero pueden "estallar" en el momento.
- Las Lunas de aire (Géminis, Libra, Acuario) intentan "entender" sus emociones y las de los demás. Piensan sobre sus emociones (a veces mucho) y, otras veces, las ignoran.
- Las Lunas de tierra (Tauro, Virgo, Capricornio) suelen ver sus emociones como algo natural, pero a veces les pueden ocasionar inseguridad y temor al "qué dirán".
- Las Lunas de agua (Cáncer, Escorpio y Piscis) sienten las emociones a un nivel muy profundo. Les cuesta poder explicarlas "en el momento". Necesitan su tiempo para digerirlas. Luego pueden hablar sobre ellas.
- ¿Cómo identifico mis emociones?
- ¿Me doy permiso para vivirlas?
- ¿Cómo las expresaban mis padres?
Todo nuestro conocimiento tiene su principio en los sentimientos.
Leonardo da Vinci (1452-1519) Pintor, escultor e inventor italiano.
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